Práctica 6: Art & Copy

Art & Copy me ha parecido un documental muy “publicitario”, en el sentido de que tratan de hacer de algo que en su propia naturaleza –documental- para muchos lleva implícito el término “aburrimiento”, algo entretenido y ameno, incluso emocionante. Esto, en mi opinión, lo consiguen gracias a la representación de la parte más personal de las grandes y exitosas campañas que aparecen. Desde los pensamientos e ideas iniciales de los creadores, o del anunciante, de los nervios pre-campaña, la indecisión… hasta la representación de otras personas implicadas en el proceso publicitario y sin las cuáles toda la creación y trabajo inicial no serviría para nada. Hablo de los trabajadores de las vallas publicitarias. En definitiva, me ha parecido un documental que sabe jugar con las emociones, gracias a entrevistas, música y al color que dan las campañas que aparecen, muchas de las cuales han pasado a ser parte de nuestras vidas. Así que combinando muchas de las características que tendría que tener un spot, nos encontramos con un documental que lejos de aburrir, puede atrapar, y no solo a los amantes de la publicidad, sino también a potenciales personas que puedan llegar a quererla, aunque aún no lo sepan.

Entrando en lo que más me ha llamado la atención, lejos de spots o campañas multimillonarias, ha sido un hecho simple pero que a veces pasamos por alto, sobre todo en estos tiempos de crisis económica. Me refiero a una frase de la persona que trabaja colocando los anuncios en las vallas publicitarias, y que viene a decir que en esto de la publicidad siempre ha habido trabajo. Desde su abuelo, que había trabajado en lo mismo que él, nunca les ha faltado. Y este hecho me ha llamado la atención porque aunque parezca una tontería, realmente nos está enseñando que la sociedad avanza, se desarrolla, se hunde y vuelve a salir a flote, pero la publicidad está y estará siempre ahí, ya forma parte de ella, en los buenos y en los malos momentos, en grandes o pequeñas inversiones, pero se ha convertido en una herramienta completamente necesaria, más si cabe en un momento de desarrollo de diversidad y multitud de marcas y productos. Así que me quedo con eso. Los tiempos cambian y las premisas de campañas exitosas del pasado se van quedando obsoletas. No hay un clave, hay la “clave del momento”, que fuera de ese momento no vale nada. Pero no debemos olvidarnos de que nos puede o no nos puede gustar la publicidad, podemos apreciarla o desconfiar de ella, pero de ahora en adelante siempre va estar presente, en cualquiera de sus formatos, ya sea en un spot televisivo o en un boca-oído, pero está implícita en nuestra necesidad de comunicarnos, y transforma y forma parte de las sociedades humanas. Así que si vales para moldearla, para entenderla, puede que tengas el futuro resuelto.